Tu cara oculta
Otra vez mi alma meditaba,
por aquella noche que recuerdo
por aquella noche maltratada.

Tu mirada estaba perdida
y mis sollozos ya se oían,
pues ya temía por mi vida,
creía que me quedaría poco.

Te acercaste a mí
y de nuevo a alcohol olías.
El miedo percibí,
al ver que venías.

Del cuello me agarraste
y un amago hiciste de tirarme.
Un engaño para despistarme
y aproveschaste, el momento,
para empezar a pegarme.

Con el primer golpe,
al suelo caí.
Mis gritos, en la noche,
ahogados sin salir.

Una tregua te pedí,
difícil tarea,
a la que no respondiste con un sí.

Como un alma en pena
a la calle intenté salir.
Pero todo fue en vano,
no pude huir.

Me cogiste por la camisa,
me empujaste hacia el ropero.
Tú dándome una paliza
y matando mis sueños.

En mi cuerpo sentí miedo
y en mi corazón rabia.
Al verte pegándome,
sin algo de lástima,
por la persona que
te ama , te quiere
sin pedirte a cambio nada.

Mis sueños contigo,
esa noche se esfumaron.
Y el temor recorrió mi cuerpo,
al ver ese cuchillo afilado.

Doce veces me clavaste,
aquel objeto punzante,
pero eso no dolió tanto,
como observarte disfrutando,
con aquel delito infame.

Un amor, un beso,
todo era tierno,
hasta que me mataste,
dejando mi corazón ciego.

Sueños me prometiste
y ninguno cumpliste.
Amor envenenado,
por tu oscurolado,
que no me enseñaste,
cuando,de ti , enamorada
totalmente me encontraba.

Te sientes orgulloso,
pero no fuiste valeroso.
Perdón no pedirás,
pero me verás, cada día,
en tu alma y conciencia intranquilas.

Cecilia María Lami Robaina